Impresiones - Pushcat, un divertido híbrido indie entre Boulder Dash y Bejeweled

Zut es el nombre de un joven estudio independiente de desarrollo y diseño de videojuegos indie afincado en la británica ciudad de Brighton. Dirigido por Fritz Solares, acaban de sacar a escena su primer título, Pushcat, un divertido arcade de tipo puzzle, que está a caballo entre títulos como  Boulder Dash y Bejeweled. A pesar de ser el primer título de Frizt con Zut, este chico ya viene de desarrollar otros títulos para la BBC y 4Channel (probad esta curiosa aventura gráfica si no la conocíais, Bow Street Runner, que mezcla escenarios recreados con actores reales y que consiguió más de algún premio, incluido un BAFTA), pero vamos a lo que vamos...


Pushcat, quizás un título más del agrado de Fritz, tiene un regustillo retro, gracias a sus cuidados escenarios pixelados obras del diseñador y artista freelance Gary J. Lucken,  y de unos sonidos que nos hacen recordar a ambientes cabareteros. Además hacen de la sencillez  y de la originalidad de su jugabilidad gran parte de su posible éxito.

Caverna del primer mundo, Push School

Adentrándonos en él, nos colocamos en el pellejo de Pushcat, un pequeño felino que tendrá como misión salir indemne de los distintos escenarios (cavernas) que pudieran presentarse en su camino. Para ello será condición necesaria recolectar un numero determinado de dulces plateados que de paso lo vuelven loco. Una vez hecho los deberes tendremos a la vista la puerta (ya abierta) que nos dara acceso a la siguiente caverna. No sólo valdrá con cumplir con el expediente, ya que para acceder a la caverna final de cada mundo será necesario haber conseguido un número mínimo de estrellas, sinónimo de que hemos hecho las cosas más que bien.

¡¡¡ Ojito que la cosa se complica con los fantasmitas !!!

Dividido en cinco mundos, cada unos de ellos con aproximadamente unas doce divertidas y trepidantes cavernas, tendremos por delante si hacemos bien las cuentas, algo más de 60 escenarios pseudo-aleatorios sobre los que aplicar una buena dosis de ingenio y habilidad de modo incremental.
Comenzando por el mundo denominado con buen criterio "Push School", se nos presentan 12+1 niveles con tintes de tutorial en el que podremos entender meriadanamente claro cual será el objetivo del juego, que pasará repetimos por conseguir los ansiados dulces plateados. Estos aparecerán siempre que podamos unir ya sea de forma horizontal o vertical tres o más piezas del mismo color.

Al comienzo todo será tan facil como poder reunirlas y convertirlas instantáneamente, para tal fin podremos ayudarnos de nuestra fuerza empujando de forma horizontal cualquier número contiguo de bloques siempre que haya sitio libre para ello. En nuestra contra tendremos los diferentes accidentes geográficos y la propia gravedad que dependiendo del escenario podrían hacer caer nuestros coloridos objetos en la "nada".

Como os podéis imaginar en los sucesivos mundos la cosa no será tan sencilla,además de la gravedad y los inconvenientes del terreno nos encontraremos con un mayor surtido de bloques, desde aquellos que se convertirán en un mayor número de objetos plateados (para nuestra suerte), a otros  que se transformarán en jodidas bombas de las cuales más nos vale escapar. Por si fuera poco también deberemos escapar de otros personajes como unos fantasmas cachondos que nos perseguirán hasta la extenuación. Todo como comentábamos a través de escenarios con una dificultad progresiva. ¡Ah! y no temáis, vuestro trabajo no será en vano, han tenido la deferencia de poder guardar nuestros progresos para así no tener que acordarnos más de una vez en el bueno de Fritz, e incluso podremos superar cada mundo siguiendo caminos distintos por si alguna caverna se nos atravesara más de lo normal.

En conclusión, creemos poder afirmar que Fritz ha conseguido cuajar un puzle muy completo, con un buen número de originales y heterogéneos escenarios,  donde tendremos que poner en evidencia nuestra paciencia para poder resolver entuertos a base de empujar, cavar o lo que se tercie, al mismo tiempo que habremos de demostrar en más de una ocasión que sabremos trabajar bajo presión sobre escenarios en ocasiones frenéticos. Todo ello aderezado con un buen gusto musical que enmarca a Pushcat en un halo retro que desde luego a nosotros nos encanta.

Podéis comprar el juego desde la web de Zut por 6€ os si preferís antes probarlo también tenéis a vuestra disposición una demo jugable, en ambos caso tenéis el juego disponible para sistemas Windows y Mac. Good luck Zut!!!

Visita la web oficial de Pushcat